Beneficios del calor para el tratamiento del dolor
El calor dilata los vasos sanguíneos y facilita la circulación, aliviando el dolor. También contribuye a una recuperación de la movilidad muscular y articular, ya que relaja los músculos y reduce las molestias con un efecto sedante y analgésico.
La termoterapia es adecuada para calmar inflamaciones producidas días atrás y mejorar la rigidez muscular y la elasticidad del tejido (por ejemplo, en contracturas, tensión muscular o tendinitis). También es conveniente en caso de un malestar recurrente o dolores crónicos (como las enfermedades reumáticas). Se debe consultar siempre al médico antes de su uso, sobre todo en casos de cardiopatías, inflamaciones agudas del aparato locomotor, hemorragia o hipotensión grave.
En Salud en Casa encontrarás una amplia variedad de almohadillas eléctricas que proporcionan un calor seco de gran alivio, con el máximo confort y comodidad de uso. Se utiliza a una temperatura de entre 34 y 36 grados, dependiendo de la sensibilidad del paciente. Además, es una buena aliada en las épocas más frías del año para calentar la cama o simplemente para relajarnos y sentirnos más cómodos en casa.
Hay almohadillas con diferente capacidad de regulación del calor para adaptarla a la temperatura de nuestro cuerpo y existe una amplia gama de tejidos, tamaños y formas, según el uso que necesitemos. Tu farmacéutico te podrá informar de todo lo que necesites.
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